Lo Bueno y Lo Malo de la Nintendo Switch

nintendo1Fue una mañana de marzo de 2017 cuando Nintendo se la jugaba el todo por el todo. La idea original que nunca funcionó en su fracasada consola WiiU, por fin estaba en manos del público y era nada menos que la nueva consola Switch, que fusionaba la mentada idea del gigante japonés de llevar juegos de última generación a cualquier parte de manera portátil o bien, reproducirlos en el living de tu casa, conectado a una pantalla externa.

¿La idea finalmente funcionó? Claro que sí, aunque no está exento de fallas menores y problemas clásicos que hacen que los gammers odien y al mismo tiempo amen a Nintendo. Y no por nada han comercializado nada menos que 14 millones de unidades a nivel mundial.

Acá algunos comentarios tras probarla durante un mes.

Configuración inicial: Rápida y hasta sin necesidad de manuales. Resulta bastante simple la conexión y el encendido de la consola. El proceso de inicio de sesión, sumado al update que requiere su sistema operativo no duró más de 20 minutos.

Estabilidad: Un aspecto destacable. No muestra congelamientos ni tampoco errores en la carga de datos. Si bien puede ser “algo” lenta al momento de arrancar un programa, el rendimiento que muestra en pleno juego es fenomenal. Nada comparado con la WiiU

Gráficos: Si bien no son descollantes como los mostrados por la PS4 Pro o la Xbox One, al estar conectado a una pantalla 4K en modo Full HD Progresivo, las gráficas son excelentes. Las optimizaciones que han realizado los distintos editores de juegos sacan partido a una consola que no busca ser pretensiosa, pero si refinada.

Memoria: Tal vez el punto más débil. Cuenta con almacenamiento nativo de 32 GB. No soporta expansión USB (Pendrives o discos duros externos) y sólo soporta tarjetas MicroSD de alta velocidad de hasta 2 TB. El problema con esto último es que el máximo de tamaño (a la fecha) disponible en el mercado es de 256 GB, algo que resulta bastante caro y, también, relativamente poco eficiente.

Juegos: Nintendo prefirió optar por lo sano y eliminó el formato disco para cargar sus juegos y prefirió la Game Card o un micro cartucho, que a diferencia de sus consolas 3DS, no permiten grabar información o avances. La capacidad de estos varía entre los 1 a 32 GB y claro, el costo por unidad es harto más caro que el disco Blu-Ray. ¿Los problemas? Varios: Son muy pequeños, por lo que son extremadamente fáciles de extraviar; tampoco son recomendables para que niños lo manipulen; el precio de los juegos de Nintendo Switch son alrededor de 10% mayor que en otras consolas. Y debido a todo lo anterior, juegos como el NBA 2K 2018, sólo incluyen la info de arquitectura del juego. El resto se descarga del servidor de EA que puede llegar hasta 20 o 25 GB adicionales… ¿Y dónde se guarda toda esta info? Ah claro, en la escasa memoria nativa de la consola.

Accesorios y costo de la inversión: Tal vez el mayor costo asociado. Si bien la consola incluye lo básico (consola, bahía, dos Joy-Con, un adaptador que une las Joy-Con y cables de conexión), accesorios le faltan y muchos. Acá algunos que tuvimos que comprar para mejorar la experiencia de juego:

  • Lámina protectora de pantalla
  • Segundo par de Joy-Cons
  • Adaptador para el segundo par de Joy-Cons
  • Cargador de Joy-Cons
  • Joystick Elite (por si no te jugar jugar con las Joy-Con
  • Estuche de transporte
  • Estuche de transporte de cartuchos de juego

El total por la cantidad de accesorios que requieras puede llegar a costarte fácilmente el 50% de la consola, lo que sumado a uno 4 juegos (para partir), podrías terminar gastando dos consolas completas. Algo no menor.

Control parental: A través de una novedosa y sencilla app, tienes el control total sobre la Switch. Puedes asignar tiempos de juego por día a los usuarios de la consola; también, configurar la clasificación de los juegos; los horarios de encendido y apagado y, adicionalmente, permite apagar la consola si es que los niños de la casa no quieren ir a dormirse. Sólo un detalle: Cada vez que la consola se apaga, queda en modo suspensión. Cuando queda en ese modo, el tiempo de la consola y la aplicación parental sigue corriendo como si se estuviera jugando un juego

Veredicto: Un juguete entretenido, adictivo, funcional. Con una autonomía de hasta 3 horas, la Switch se convierte en la consola familiar que todos buscamos para jugar con nuestros hijos pequeños, gracias a su variedad de títulos y lo simple de transportar. Vale la pena como la nueva adquisición en tu hogar, a pesar de los tradicionales detalles de Nintendo