Las Razones de Porqué Destiny es el Juego del Año

Destiny-GI-Cover

Destiny se ha convertido en el fenómeno de la década (y podría ser de la historia) de la industria de los videojuegos. 5 años de desarrollo, US$ 500 millones gastados, 500 personas trabajaron en levantarlo, fue testeado por 4 millones de jugadores… Y demoraron 1 día de venta en recuperar lo invertido.

Con una campaña publicitaria y digital nunca antes vista, está claro que si no estás “en modo Destiny”, no eres nada.

Hasta el momento las críticas sólo han ensalzado la apuesta de ActiVision (editores de Call Of Duty). 150 premios y nominaciones durante sus presentaciones públicas y decenas de miles de fanáticos que hicieron cola durante la noche previa al lanzamiento (9 de septiembre de 2014), para ser los primeros en llegar a casa y pasar el día jugando online.

Bungie, quien fue la musa inspiradora y la responsable de dar vida a la saga Halo para Xbox y Xbox 360, tras su separación de Microsoft, firmó un contrato multimillonario por 10 años con ActiVision, para asegurar al menos tres secuelas más del juego, que mezcla de una forma magistral, una campaña excitante, un multijugador dinámico y un juego de rol, que nos hace recordar los mejores momentos de Elders Scroll Oblivion y del incomprendido Mass Effect.

Más allá de hablar de lo que todos ya saben, es bueno poner énfasis en algunas cosas que son parte del análisis profundo que pocos han dimensionado: La forma en cómo Bungie pudo crear este universo envolvente que alguna vez quiso transformar para Halo, pero que finalmente quedaron en buenas intenciones.

Música

La banda sonora está en las manos del talentoso Martin O’Donnell, quien compuso una hora de música, junto a Michael Salvatori. Paul McCartney también contribuyó en las partituras, las que se grabaron entre 2013 y 2014 en Abbey Road Studios.

Tras finalizar el soundtrack, O’Donnell fue despedido por Bungie, pero su legado es feroz. La música energizante, envolvente, estremecedora, recuerda los mejores pasajes de Halo 3 y Halo Reach, cuando en el fragor de la batalla, las melodías al estilo concierto ayudaban a crear sin lugar a dudas una experiencia épica que pocos jugadores han podido olvidar. A tal punto que Halo 3 fue en su minuto la banda sonora de un videojuego más vendida del mundo y ya en foros de discusión se está pasando el dato de cómo conseguir la de Destiny.

Jugabilidad e IA

Para los habituados a Halo, el tomar las armas de Destiny será completamente natural. Los poderes especiales son fáciles de invocar, el manejo del fuego ante oleadas de enemigos también. Se agradece que siempre existan recursos (aunque escasos) para mantener un poder de fuego que está al límite pero que es difícil que te deje en cero. Ciertos tipos de enemigos dejan en el suelo cargadores para tus armas principales tras una fuerte escaramuza, por lo que luego de la masacre, hay que recorrer el campo para recogerlas.

Destiny_09

En cuanto al mapa, prácticamente sin errores, deja espacio para que cada recoveco, caverna o acantilado sirva para posicionarse y jugar al francotirador, con el objetivo de despejar la zona antes de avanzar, si juegas en modo campaña.

La IA de Destiny es sorprendente y demuestra que el centralizar la jugabilidad en sus servidores, resulta mejor que hacerlo en cada consola. No es un juego en streaming, pero sí mucho del comportamiento de los enemigos y el posicionamiento de tropas, son claramente comandados externamente, hecho que permite que el juego estudie tu manera de desenvolverte en el mundo Destiny y con ello vaya aumentando la complejidad y la “inteligencia” de tus oponentes.

Por eso, ya no es raro ver que ciertos enemigos que están posicionados a larga distancia, no caminen haciendo un recorrido establecido (patrulla) o dando vueltas elípticas, lo que servía antes para poder abatirlos sin mucha dificultad. Destiny de hecho, tras tus primeras 3 horas ya tiene claro cómo juegas y hace que los adversarios en modo campaña se comporten en el enfrentamiento en la forma que más te complica jugar, lo que hace que sea un desafío, más que pasar el rato.

En cuanto a vehículos e historia, Destiny también basa mucho de su desarrollo en Halo. Tienes una inteligencia artificial que te acompaña y te guía durante el desarrollo de la campaña. Puedes robar y usar vehículos de tus enemigos y sumado a eso, con el paso de los niveles de experiencia, puedes ir equipando a tu personaje (elegible entre 3 razas diferentes) con armadura, armas, talentos y poderes especiales. Por lo mismo, en el modo multiplayer (otro universo aparte) las diferencias entre un enemigo nivel 20 versus uno de nivel 6 (equivalente a unas 3 o 4 horas de juego) es sencillamente brutal.

Es Destiny, No Halo

Para jugadores algo viejos y avanzados que tuvieron la suerte de jugar Xbox y Xbox 360 y que han pasado por toda la saga Halo, hasta antes de Destiny existía una especie de depresión por la salida de Bungie desde Microsoft, algo que quedó completamente ratificado con Halo 4, una plástica y muy mala secuela de la trilogía original y que dio inicio al menos a 3 más que se vienen para Xbox One.

Lo que no tiene hoy Halo, lo tiene Destiny y que es lo que vuelve locos a los jugadores: Corazón y mística. Los diseñadores logran con Destiny colocar al jugador como el centro de la trama y de los destinos del universo. No eres una persona que maneja al personaje para lograr un objetivo: Tú eres el personaje, tú estás dentro del mundo, tú eres el que debe convertirse en leyenda y terminar el juego con el máximo honor y experiencia. Si bien la historia del modo campaña está bien direccionada, existen ciertas decisiones que tomas durante el tiempo de juego que pueden ayudar a mover la balanza a favor o no de adelantar el desenlace.

Pero Destiny no es Halo. Se parece mucho en su estructura y en su ADN, lo que fascinará a los jugadores de PlayStation quienes por años miraban con desdén a su competencia y cómo millones de fanáticos gozaban con un juego exclusivo que los hacía sentirse parte de una cofradía.

Destiny universalizó el motor de Halo, su IA, su jugabilidad y su ADN. Expandió sus horizontes hasta niveles ilimitados, con más de 12 horas de campaña (que incluso perfectamente pueden llegar a 18 o 20), un modo multijugador en línea masivo bestial y adrenalínico y también, una historia interesante (aunque no es lo mejor) que si bien abandona el concepto de superhéroe con que se levantó a MasterChief, pinta claramente para que sea el comienzo de una saga que podría terminar siendo épica con los años.

Está claro que Destiny es un gran arranque, como lo fue Halo Combat Evolved. El juego está generando millones de fanáticos, jugadores online por toneladas, críticas benevolentes y un ejército de seguidores que tras esto, querrán más. No se me ocurre cómo podrían ya superar este universo, que definitivamente es el más apoteósico y masivo jamás creado en la industria del entretenimiento digital. Pero es posible que Bungie y ActiVision ya lo tengan claro.